Cuando nos dimos cuenta, ni lluvia , ni semáforos ni nada, estaba ya en su sitio, flotamos, detenidos en un salto eterno que solo duró segundos, ya nos veremos pensé, luego... luego todo volvió al sitio.El aviso cesó.
Siempre que voy a una papelería o ferretería me quiero comprar todo lo que veo, son dos sitios que me superan, nunca compro todo lo que veo, pero casi siempre acabo comprando algo. En este caso compré un juego de plumillas para cómic, que llevaba una cajita muy mona con sus seis plumillas,(en realidad tres plumillas diferentes y un juego de repuesto) y sus palilleros correspondientes.